Bienamados sobrines, pensando en las próximas elecciones a constituyente (y en un arranque de originalidad) es que se me ocurrió comenzar un ciclo de entrevistas a candidatos a dicho escaño. El primer interrogado es Cristóbal Bellolio, más conocido como “El Bellolio bueno”.
En un inicio esta entrevista iba a tener lugar en el regio despacho que tiene Cristóbal en la Universidad Adolfo Ibáñez, pero a medio camino me apuné.
Estimado Cristóbal: Primero que todo agradecer tu disposición y tu tiempo para con este espacio. Siempre es bueno para mis sobrines-lectores —gente cuasi analfabeta— leer a verdaderos intelectuales de la política, gente con la que se pueda hablar con altura de miras sobre temas sesudos que se alejan de la chimuchina típica de los programas de tv. Cristóbal: ¿Es Venezuela una dictadura?
R: Jajaja, una pregunta original para partir. Creo que Venezuela dejó de ser una democracia hace rato, si por democracia entendemos algo más que llegar al poder por las urnas. Yo creo que una democracia protege la libertad de expresión y de disidencia política, asegura espacio a los opositores, organiza elecciones limpias, el gobierno respeta los resultados cuando son adversos, etcétera. Las democracias contemporáneas ya no mueren con bombardeos a la antigua como a ti te gusta, sino a través de una sistemática erosión de instituciones que están al servicio de todos y no solo de quienes detentan temporalmente el poder.
Cristóbal: Como una forma de sincerar los números de tu campaña electoral ¿Qué porcentaje de los aportes recibidos en tu cuenta rut serán destinados a pagar esta entrevista?
R: Eso lo podemos conversar después. Por ahora me interesa destacar que somos la campaña que más aportes menores a 50 mil pesos ha recibido a nivel nacional, y la tercera con más aportes de personas naturales en general. Hay pocos peces gordos, pero mucha gente común y corriente que suscribe nuestra visión constitucional, tanto en el fondo como en la forma. Eso nos tiene muy contentos. Así ganó Obama en 2008; espero sea un presagio.
¿Que tan cierto es que te dejas la barba y el pelo largo para no irte al lado oscuro de la fuerza y terminar —por ejemplo— en la vocería de algún gobierno en estado terminal?
R: En Star Wars queda muy claro cuál es el lado oscuro de la fuerza, porque se reconoce como tal. En la política chilena, diría que todo depende del punto de vista con que se mire. Para la derecha dura, es evidente que yo soy el Bellolio Sith. Para el mundo más progresista, probablemente sea ligeramente al revés. En cualquier caso, hasta los Sith podrían contar un relato de por qué son la mejor opción para gobernar la galaxia: orden, seguridad, progreso tecnológico. No digo que las comparta, pero ya no estamos en edad de maniqueísmos baratos.
¿Cuanto te ha afectado la pandemia? ¿Extrañas —por ejemplo— ir al Lolapalooza con tus amigos?
R: Nunca he ido a un Lolapalooza, la verdad. Lo más cercano a ese estilo que he ido fue un Primavera Fauna donde tocó Pulp, Bomba Stereo y Jorge González, y fui porque me invitaron. Mi último concierto fue Iron Maiden en el Movistar Arena, días antes del estallido social. Me pierdo un poco con el cartel de los conciertos para adolescentes. Tengo que aceptar que en materia musical tengo ciertos resabios conservadores, aunque le tengo respeto al reggaeton. El último disco que me regalaron es el álbum debut de Bad Bunny.

¿Has considerado dentro de tus propuestas como Constituyente incluir la meditación como un derecho consagrado?
R: Respeto todas las formas de espiritualidad que no infrinjan derechos de terceros. Por lo mismo no singularizaría ninguna. Cada persona y comunidad decide cómo contesta las últimas preguntas de la humanidad y el cosmos.
¿Cómo fue pasar del catolicismo al ateísmo y de ahí a convertirte en el “Yo Soy” de Osho?
R: El viaje del catolicismo al ateísmo fue el tránsito de un joven intelectualmente inquieto, muy parecido al de muchos en Chile y en mi entorno cultural. Creo que fue honesto, sin rabia, aunque reconozco que mi ateísmo alcanzó ribetes militantes. Hoy sigo siendo ateo, pero tengo muchas más ganas de establecer un diálogo interreligioso que me permita seguir reflexionando y aprendiendo. Lo peor es quedarse pegado.
¿Qué tan compatible es la meditación con el liberalismo?
R: Enteramente compatible. No veo donde podría estar la tensión. Más todavía, siendo la meditación un proceso de reflexión y trance individual, me parece bastante alineado con la idea religiosa del protestantismo liberal, donde la fe es personal.
Cuando acabe esta pandemia, con quién irás a carretear primero ¿Alberto Mayol o Axel Kaiser?
R: Me llevo bien con ambos y me he tomado unas copas con ambos. Las ventajas del amarillismo.
Por último, quisiera darte la oportunidad para que te dirijas a tus votantes del distrito 11, y contarles porqué deben votar por ti, siendo que tienen excelentes alternativas como Marcela Cubillos, Clemente Pérez o Mariana Aylwin.
R: Tienen excelentes alternativas en general. En mi lista además está Paola Berlin, Cote Cumplido, Elisa Walker, Sara Larraín, Pato Fernández y Juan Enrique Pi. Le tengo especial cariño a mi amigo Hernán Larraín Matte, que corre por la derecha. También valoro a Tomás Recart. A la gente del FA la conozco menos en este distrito. Creo que hay para todos los gustos. Por mí deberían votar quienes quieran un perfil nuevo e independiente (nunca he militado en partidos ni he ejercido cargos políticos), que tenga preparación y dedos para el piano (soy profesor universitario de teoría política y mi pega es pensar las mejores formas de vivir en común), que tenga ideas liberales en general (que defienda las libertades personales en un marco de igualdad de oportunidades, promoción de capacidades y respeto mutuo) y que pueda servir como puente para construir acuerdos en la Convención, con apertura y destreza.
Muchas gracias por tu tiempo joven Cristóbal. La verdad es que tenía toda la intención de regalarte un libro de Max Weber, pero se me echó a perder la fotocopiadora, así que te traje unos tatuajes temporales que venían en unos loly pop que me encontré en el paletó.
R: Te los acepto. Ojalá que además sean polémicos y den lugar a segundas lecturas de los suspicaces de siempre.