“Tío Mamo, la columna de esta semana tiene que ser tan extensa como un reportaje de Ciper” me dijo mi ricura editora Matus, vía guazap. Contrariado, me metí a un conocido café del centro de Santiago, con la idea de encontrar inspiración entre mocaccinos y siluetas femeninas. Observaba ensimismado el vestuario de una de lasSigue leyendo «El interrogatorio del Tío Mamo: Fernando Paulsen»